Color y Sentimiento

El

Sonido

Endulza mis sentidos el sonido,
los hace funcionar con alegría
para tener el tiempo de hablar,
soñar despierto en la mañana
dormir paciente en madrugada,
estando allí desde mi infancia
vigilante, austero, divertido.

El sonido y el silencio conversan,
intercambian halagos y fantasías
dejan las oscuras formas del engaño
para hundirnos en el lecho azul,
para platicarnos en murmullos
en el silencio del planeta tierra,
en la tristeza de la agreste luna.

El sonido se vuelve visual,
danza transformado por el viento,
se abre ante los abismos mudos
explicando el porqué de su sentido,
cambiando nuestra piel al escucharlo,
la honestidad que nos hace presa
y la vida que sonríe en primavera.

Del poemario

“El amor y mil palabras”

Agua

Agua que corres lenta entre mis dedos,
acaricias el rostro de mi amada, mejor lenguaje,
y sanas, adulterando la razón de la tierra
junto a mí o entre piedras y arroyos viviendo
te llevo a mi boca vacía y trago bebiéndote...

Agua querida y exquisita, te observo en la orilla del mar,
en los ríos de mi tierra, en lagunas encantadas
te espero, en nuestra iluminada vieja casa,
para que abriendo el cielo mojes mi cuerpo,
vivas en mí y yo en ti, en distancias infinitas...

Así protegeré tu súplica como hago con el viento,
así construiré una baranda entre tú y el hombre
para ver crecer las flores minuto a minuto cada día,
medir mi cuerpo ahogando mi sed en el silencio,
pintando de verdes el paisaje, la vida, la alborada...

Del poemario

“Teatralización del Cosmos”

Ecología

Sublime santuario de los pájaros
que respetan la naturaleza y la vida...

Gigante herido, deforestación alterando el clima
océano asediado, turbio, sucio, forastero de viaje...

Hombre invasor de especies extrañas
chatarrero de residuos, esclavo de la basura
que contamina, erosiona, destruye...

Energías renovables, vida que es más vida,
color que es avance, tierra magnánima
civilización del mal consumo...

Ecología estás allí pensando
cuando te dañan a ti, nos dañan a todos
deshumanizan el planeta, marcan el final de la vida
planeta mutilado, apocalíptico, caótico...

Última gota de amor que se convierte en odio,
catástrofe indescriptible que transforma
la vida de unos y otros...y de aquellos...

Adiós ciclo reproductor, amenaza invisible,
desintegración, planeta amado y triste,
aire envenenado, desierto en avance,
tubos de escape, nubes de azufre, tierra sobreexplotada,
aguasturbias, efecto invernadero
elementos metálicos abrumadores,
virus viajeros, muerte química,
invierno nuclear, diluvio que cae
y no lava, no redime, no libera,
capa de ozono, naturaleza en peligro.

Eres la gran casa para vivir todos,
donde habitan mis recuerdos, el abrazo, la risa, el beso,
el llanto de mamá, el canto del ave, el rojo de la tarde...
el espejo que conoce nuestra novela cotidiana,
el libro que se abrió para obsequiarnos el primer cuento,
nuestra escuela, el avioncito de papel,
la manzana de esta mañana, el caudal del río,
la piedra y la paja, la arena y el trigo,
el maíz y la retama, el algarrobo y las cabras,
la vieja máquina de escribir, los patines y la bicicleta,
los árboles de la ventana del abuelo,
los geranios blancos camino hacia la iglesia,
el barrio y los amigos, las campanadas del retorno,
la ilusión del amor vivido…

¿Dónde está el último refugio, entrañas de mujer,
para prolongar la vida?
despertando las conciencias,
preservando el paisaje,
el cuerpo entero, la única historia posible,
nuestro escenario, nuestro espacio ilusorio
donde nacen las palabras,
los pensamientos gritan y las voces callan,
la biblioteca digital de mi hijo amado
el perdón de los pecados, el rosario de Santa Rosa,
el sueño de Sizú, la molestia de Dalí,
el tic tac de mi reloj adolescente,
mi cama descansando cuando cae la tarde…

Paisaje mutante, plantas distintas, aves sin nido,
hombres cuya sombra pasó al olvido…
Amado planeta, ecosistema de aire,
oxígeno, vapor de agua, lluvia, sol y fuego.

Biomasa orgánica, laboratorio diabólico y cotidiano,
origen de nuestra propia vida
y nuestra cercana muerte
donde se rehacen mis poemas
cuando amaneces a mi lado con la ventana abierta,
el sol alumbrando desde temprano
la luna descansando en la alborada
del pecado perdonado, del morder las entrañas,
y seguir cazando las aves
en la cercana tumba que compartimos todos,
en la dulce canción que anuncia un buen mañana…

Abrazar la luna enamorada,
despertar con los ojos y el corazón ilusionados
del amor verdadero
derramando miel en los labios
para saborear mientras cierro mis ojos
y crean los dibujos infantiles
que dicen con ternura la importante vida de los niños
de la perspectiva hacia casa
y los animales corriendo tras las aves,
cuando dejamos el instinto para obrar como normales
cuando apasionados regalamos nuestra
energía a la madre tierra
y salvamos del planeta lo que aún nos queda:

El amor, la sonrisa, los ojos que trasmiten dulzura,
las palabras bellas,
las secretas obsesiones,
los besos aún sinceros,
la inocencia, la alegría, lo extraordinario, la tranquilidad,
el Padre nuestro, el Ave María,
la capa de ozono, el descanso,
la luz, el soñar,
por siempre soñar,
soñar…

Del poemario

“Teatralización del Cosmos”

Besos

Hay besos que guardo en lo profundo de mi pensamiento,
los que reservo en una cabina de un amor malentendido,
los que ablandaron mi corazón y abrigaron con sonrisas
mi tranquilidad de amar y ser correspondido...

Hay besos guardados en lo festivo de tu mirada,
en el balance de la poesía que más te agrada,
volando por la ventana cada mañana
y volviendo en la noche soñada enriquecidos ...

Hay besos tuyos y los míos, sensación
de haberte amado ayer y no lo olvido,
la ironía de tu encanto y mi desapego,
el inicio de nuestro amor y mi feliz lamento...

Entonces mi piel se eriza, el calor habita en mi sangre
para acercarme a ti con el más profundo amor.
para despertar nuestro apetito que avecina
la razón de estar aquí, contigo, juntos en un beso.

Del poemario

“El amor y mil palabras”

Mis

Palomas

Como el viento
vuelan a lo alto
mecen sus alas
románticos encantos
de los sueños azules,
del baile entre pétalos y hojas,
mientras mecánicos alarifes construyen
pacientemente sus nidos,
rincón de encuentros
de arrumacos donde el tiempo
se ha detenido por siempre.

Color

Puerta

Hay puertas que tienen la pasión del encanto,
las que se han detenido en el hall de nuestra casa,
las que son pequeñas y las que son grandes,
las que están talladas y las simples,
las que guardan encanto naciente...

Hay las que siempre están abiertas,
las que se cierran con soberbia y matan recuerdos,
las que son dolorosas y se fatigan,
las que poseen ritmo y bailan en vaivén,
las que tienen soledad y nadie las toca...

Hay puertas que siempre se lamentan,
las que matan la alegría de nuestra visita,
las que se creen lo máximo y son nada,
las que son fábula para engañar a la gente,
las que han sido acribilladas cada noche.

Así el color de ellas se pasó a nuestra piel
como quien lanza un petardo a la deriva,
como quien hiere y mata un cordero
sin respeto, sin humildad, sin asomo de asistencia,
solo mirando el color de lo que envidia…

Pero también hay puertas que cierran el tabernáculo,
se abren para recibir a Papá Noel una navidad cualquiera,
las que esperan el regreso de un amor en madrugada,
las que sirvieron para enjuagar nuestro llanto,
las que aún tienen el encanto de la espera…

Por qué comparar su piel con la nuestra
si ella encierra nuestro vehículo en su interior,
se abre para la esperanza y la risa
y grita, en la cuadra, en la calle, en la avenida,
sin reclamar, sin cerrar, solo amando.

Del poemario

“Teatralización del Cosmos”

Pensamiento

167

Son tantos, están pendientes de mi actividad, mi vida, mis
sueños, mis escritos, mis pinturas, mis consejos y mi cabello
blanco camino a nieve.

Son tantos como un personal diccionario donde cada cual
aparece subrayado y abrazado en la distancia del recuerdo.
Son tantos que aparecen en mis pensamientos, en mis lágrimas
y en mis recursos agradables del presente. No son temporales,
tampoco lucen en su pecho una medalla con mi nombre escrito
o grabado en algún moderno sistema. Son tantos que han
convertido nuestra relación en un matrimonio de sueños,
recursos, abrazos, besos y los más bellos pensamientos para
brindarme la oportunidad de seguir viviendo.

Están pendientes de mis hechos, mis relatos, mis grafías y mis
pensamientos. Tratan de convencerme de que existo en sus
instintos para amar, y en mis sueños del no despertar. Están en
cada parte de mí, en cada movimiento de mi cuerpo, en cada
sueño de atracción. Tienen la riqueza espiritual para sacarme
del peligro y convencerme en nuestra relación.

A la noticia de mi problema de salud reciente, han respondido
con palabras de aliento, con las llamadas telefónicas más
distantes con los sistemas contemporáneos de comunicación,
con blanquecina alegría, con la medicina más curativa,
con las flores más perfumadas. Por esas tantas razones,
quiero agradecer una vez más a quienes les alientan con sus
palabras, sus saludos, su atracción.
Ahora me toca a mí agradecer a los amigos, familiares,
ex alumnos, colegas, amigos del arte, creyentes religiosos que,
desde los más cercanos y lejanos rincones del planeta,
me vienen saludando y obsequiándome tranquila aceptación
de mi salud. Como todos ellos, también persigo sueños y creo
no haberlos aun totalmente cumplido.

Gracias por su aliento, por la sutileza para tratar el tema.
Gracias por la cercanía de sus vocablos, la realización de
sus deseos y la sonrisa que empieza a regalarme la vida,
devolviendo lo que recientemente había perdido.
Gracias por ser extremadamente bellos y que sea el amor
el que siga acompañando sus buenos deseos...
Gracias.

Enrique Bustamante, 2020

Fluye

Fluye mi amor hacia ti mi azucena encantada
para aprovechar tu aroma regado al viento,
para suplantar tu color bajo los ojos míos
entregándote con profundo amor a mi pecho....

Fluye tu piel al pie de esta linda noche
para formar con tu cuerpo, única figura,
para encontrar en la totalidad de nuestro ser
la eterna profundidad del querer tocarnos...

Fluye nuestro pensamiento a la deriva,
nacen del desorden de nuestros sueños fortuitos
sienten, tocan, escapan como seda entre tus manos
como carbón de amor que quema en la hoguera...

Así los astros y las estrellas cohabitan con ternura,
el mar y el cielo cambian de color y se arrebatan,
danza la algarabía de reencontrarnos hermosos
para disfrutar de ti y de mí, hoy más fervientes.

Del poemario

"El amor y mil palabras"